lunes, 15 de abril de 2013

LA VIDA SE NOS VA




Cierro los ojos y parece que lo esté viendo. Creo recordar que eran las 5:30 de la madrugada cuando sonaba el despertador, era el día 1 de enero del 2005, SI SI, el día de año nuevo.
Cuando aun había mucha gente celebrando la entrada de año y curando la borrachera,  mi gran amigo Luis y un servidor, decidimos celebrarlo de otra manera.
         Aprovechando la horas de fiesta de una mayoría, nos disponíamos a ser los primeros del año en coronar la cima del Espigüete de 2451mt y situado en la montaña Palentina.
La fuertes nevadas caídas los días anteriores, intuían que seria difícil coronar la cima en aquellas condiciones.
         Mi tranquilidad era pasmosa, adentrarse en los dominios de semejante pico con la compañía de Luis, relegaba el término "peligro" a una posición casi invisible.
A parte de abrir vías de escalada en el Espigüete y muchas otras montañas, Luis es un gran conocedor del término "montañero", es mas, diría que lo lleva tatuado pero nunca me lo ha confesado....jajaja
        Pues esa madrugada ahí estábamos Luis, su padre Alfonso y yo, dispuestos a comernos la cima con patatas.

   Éramos unos locos los tres, pero Alfonso no vino porque sabía de nuestro grado de locura y no se veía con fuerzas para seguir nuestro ritmo endiablado cuando iniciáramos el ascenso, sin ninguna obligación, se levanto con nosotros para desearnos un gran día de montaña.

Dicho y hecho, bregando con la nieve, con el sueño y atacando por la cara Sur conseguimos cima antes de lo esperado. el paisaje era sobrecogedor, sintiendo el frio de la nieve y contemplando el espectacular mar de nubes que se abría mas allá de las cumbres.

Nacimos montañeros ???, no lo sé, creo que no. De pequeños somos como esponjas, lo absorbemos absolutamente todo. Si papa o mama hacen algo, tu infante, desconocedor del mundo que te rodea, lo tomas como un ejemplo a seguir.
        Pues bien, Luis y yo tenemos la suerte de tener unos padres amantes de la montaña, de sus arroyos, de sus árboles,  de sus pájaros.... de todo lo que reúne el término naturaleza.
Podemos decir que es de ellos, de los que hemos heredado  nuestro amor por los grandes y maravillosos paisajes que te ofrece la madre tierra.
       Que si estamos orgullosos???... orgullosos se queda corto, QUEREMOS con locura a nuestros padres y además, estaremos eternamente agradecidos el habernos inculcado estos valores y que gracias a ellos, a día de hoy, podemos aparte de disfrutar, intentar enseñarselos a las futuras generaciones, a nuestra manera, pero lo intentaremos.
       Pero no todo es alegría, desgraciadamente, la vida ha querido llevarse al padre de Luis, fruto de una enfermedad por todos conocida y de la que se me hace difícil nombrar.
Todos hemos pensado alguna vez que la vida es injusta, echa mano de quien no debe y deja a quien..... En fin, que no es justa y punto.
       El problema es que (en su mayor parte) no depende de nosotros. Recuerdo que hace pocos días pregonaba a los cuatro vientos mi sensación de libertad y de fusión con la naturaleza. Los días pasan inevitablemente, lo único que podemos aportar a nuestro ir y venir es un halo de energía positiva. Seremos a la vez que protagonistas, cómplices en el estado de ánimo de aquellos que nos rodean.
       
 Seguiré pensando que nuestro amigo Alfonso seguirá viviendo de la montaña con nosotros, disfrutando de nuestras ganas de vivir, ayudándonos con su recuerdo a intentar ser mejor personas modificando aspectos de nuestra vida que solo él, allí donde este, puede cambiar.

Alfonso, un millón de gracias, por dejarme compartir contigo grandes momentos de risas, por darme un amigo con el que poder disfrutar de la montaña y por SER COMO ERES.
Y  a Encarnita, Álvaro y Luis, desde aquí, un fuerte abrazo.


4 comentarios:

  1. Muchísimas gracias David por tan bellas palabras. Precioso homenaje. Eres un "mákina" en lo deportivo y, aún más, en lo humano.
    Un abrazo muy fuerte de parte de todos.
    Encarnita, Luis y Álvaro.

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  2. Mucho ánimo David. Es bonito pensar que la montaña nos acogera una vez que llegue el momento!! Fuerza y hasta la vista alpinista!!

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  3. Luis, no se merecen las gracias, cuando las cosas se hacen de corazon, las palabras salen solas.
    Un abrazo familia....

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  4. Juan, la monataña no se marchara nunca, sera nuestra compañera de viaje.... un abrazo amigo

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